viernes, 10 de abril de 2015

¿Qué mejor juego para un niño que hacer deporte?

       
    Como mami runner y deportista que soy, intento inculcar a mi hijo el deporte como hábito saludable en vida, ya desde chiquitín, es por ello que quiero contaros las razones en la que me baso para que mi hijo haga deporte:
        Con la práctica de algún deporte se favorece que nuestro organismo se desarrolle adecuadamente y tengamos una salud de manera general óptima, además hace que nuestra salud mental también esté más sana para afrontar las dificultades que la vida nos pone.
Además, si desde pequeños les fomentamos este hábito –y digo hábito porque yo considero que debe ser así: algo que se debe hacer de manera habitual y constante- estaremos previniendo su obesidad o sobrepeso.


Por otro lado, imagino que habréis notado que vuestros pequeñines cuando realizan deporte, caen rendidos en la cama ¿no?, pues esa es otra de las razones, y es que facilita el descanso y la relajación de los músculos y los nervios o tensiones que puedan tener en su vida cotidiana.
Mediante el deporte, también se les motiva a la consecución de metas y premios con su propio esfuerzo y ver que el trabajo lento pero seguro le puede dar mucha satisfacción. Los niños suelen ser muy impacientes y siempre quieren todo “a la de ya”, y con el deporte comprobarán que las cosas buenas no se consiguen solo así, sino con mucho tesón por su parte. Asimismo, aprenderán mejor a tolerar la frustración al ver que no siempre se gana, lo cual es sano.

         Y por supuesto, el deporte permite al niño conocer otros niños y socializarse, y si tu hijo/a es un poco tímido le ayudará a serlo un poco menos, porque además con ellos compartirá sus éxitos o fracasos. A mí me encanta cuando mi hijo mete un gol o cualquier amigo suyo y se buscan para abrazarse. El deporte es algo sano y lúdico y practicándolo disfrutan muchísimo y se divierten.
Siempre pienso que si desde pequeños se les inculca este hábito, de adolescentes “no se perderán” por otros caminos oscuros, a los que yo personalmente tengo mucho miedo y que creo que todos los papis luchamos porque evitarlos. Y ya desde pequeñitos el deporte es una alternativa estupenda de cara al sedentarismo, televisión, videoconsolas, etc….


                Si tenéis miedo a las pulsaciones de vuestros hijos al hacer deporte, no os preocupéis si veis que las tiene muy aceleradas ya que los niños tienen más pulsaciones que nosotros los adultos, es por ello que un pulsómetro en un niño es un poco inútil ya que no será real el resultado. Como todo con los niños, hay que dejarse llevar por el sentido común y ver cómo reacciona tu hijo y las consecuencias.
Yo me acuerdo de pequeña que mi madre no me dejaba casi practicar ningún deporte por ciertos tabúes como que “haciendo deporte dejas de crecer”. Pues bien, hacer deporte no limita ni incrementa, ni tampoco acelera o retrasa el momento en el que se produce un pico de crecimiento. Nuestros hijos tienen la altura escrita en su genética. El deporte ayudará a que tengan un cuerpo más compensado, sean más equilibrados y ágiles, pero ellos crecerán lo que tengan que crecer por genética.


        Y por último, si te preguntas cómo alimentar a tu hijo antes de una competición, hazlo de manera normal, no hay por qué sobrealimentarlos, ya que eso hará que se sientan más pesados, con un vaso de leche y unos pocos de cereales y un plátano bastará, pero no le atiborres, y que sea como mínimo una hora antes de comenzar el deporte.







             Desde aquí os quiero animar a todos los papis y todas las mamis a que practiquéis deporte con vuestros hijos, ya que es una manera sana, divertida y barata de divertiros en familia; y aunque vosotros no lo practiquéis haced un esfuerzo ya que ellos os imitarán.




¿Qué mejor juego para un niño que hacer deporte?

Ya me despido con este mamitruco saludable para nuestros hijos. Espero lo pongáis en práctica.  



¡¡¡¡¡ BE HAPPY!!!!!